Los jardines renacentistas aquellos vergeles de las villas florentinas de los Medicis, que personajes como Cosme el Viejo o Lorenzo el Magnífico mandaron construir en lugares de ensueño como Fiesole, Careggi, Poggio, Castello o Boboli, son los protagonistas de este original ensayo de María del Carmen Molina Barea. Entre sus avenidas y parterres, los filósofos humanistas neoplatónicos, liderados por Marsilio Ficino y Giovanni Pico della Mirandola, encuentran el lugar privilegiado para que el alma pulule, se expanda y deleite, y el individuo, al recorrerlos, como si se internase en un laberinto, se pierda a sí mismo, se extravíe como sujeto y se metamorfosee